Hoy, cuando hablamos de convivencia escolar tenemos que hablar también de ciberconvivencia, y cuando hablamos de acoso escolar (bullying) tenemos que hablar de cyberbullying. Ambos fenómenos tienen lugar en el entramado de relaciones interpersonales que los escolares activan como redes de comunicación, actividades y vida en común. Esta vida en común proporciona muchos beneficios y ventajas, pero también algunos problemas y dificultades.Un modelo educativo para la prevención del acoso y el ciberacoso escolar es la actualización y mejora del libro Educar la convivencia para prevenir la violencia, que se publicó en esta misma editorial hace unos años. Además de la revisión y mejora de sus propuestas anteriores, este libro incluye iniciativas y estrategias a desarrollar con escolares, docentes y familias para prevenir los riesgos que para la vida social de los jóvenes tiene la ciberconvivencia, presentando el programa ConRed. El ConRed parte del modelo que puso en práctica el proyecto SAVE de los mismos autores, que incorporan aquí el trabajo educativo que desde el centro escolar puede desplegarse para la optimización de los hábitos de uso de Internet y las redes sociales, tan presentes en la vida de los jóvenes.