BIDDULPH, STEVE
Todos poseemos la capacidad de percibir o conocer algo sin que intervenga el pensamiento racional. Antes de que la neurociencia lo explicara, hablábamos de «corazonadas» o «intuición» para referirnos a este fenómeno, pero se trata en realidad de un «supersentido»: una capacidad muy avanzada que posee el cerebro para integrar información sensorial a la velocidad del rayo, sin pasar por la conciencia. ¿Cómo funciona y cómo podemos emplearlo para desarrollar nuestro máximo potencial?