SIEMENS, SANDRA & ALCÁNTARA, MARIANA
«¡Hola! digo dentro de mi lata ¿que? me queri?as decir? Mi abuela escucha, despue?s pone la boca en su lata y me dice: No me acuerdo. No importa le digo. Dime la palabra que me gusta y listo. Me gusta cuando mi abuela me dice tivolio. A mi? me parece que es como un budincito, pero no es un budi?n. Quiere decir te quiero». Las relaciones, al igual que las semillas, necesitan de la dedicación, el alimento y el tiempo necesarios para cultivarse. En La conversación una abuela y su nieto convierten la cotidianidad en una hermosa cosecha mediante palabras de afecto