BLACK, HOLLY
No es agradable despertar a medianoche en el tejado del internado en calzonzillos sin entender cómo has podido llegar hasta allí... solo recuerdas que estabas soñando con una gata blanca. No es agradable que tus compañeros de colegio te graven con sus móviles y sospechar que dentro de poco aparecerás en YouTube. No es agradable que te expulsen temporalmente por lo ocurrido, aunque no tengas ninguna culpa. Pero lo que no es nada, nada agradable es saber que mañana estarás con tu familia en casa, donde ser un chico de diecisiete años bastante normal es, precisamente, lo raro. Cassel Sharpe pertenece a una familia donde todos tienen poderes y los utilizan clandestinamente. Su madre está entre rejas por timar a millonarios, su abuelo y su hermano mayor trabajan para una de las grandes familias de la mafia. Tan solo su hermano mediano, que estudia en la universidad, y él están al margen: el primero porque no utiliza su habilidad, y Cassel porque no posee ninguna. Siempre ha sido el raro: en su familia, por carecer de poderes; fuera de ella, por la familia que tiene. Aunque Cassel solo aspira a ser «normal», y lo es en todos los aspectos salvo por un «pequeño» detalle: hace tres años se despertó y descubrió que había matado a Lily, su mejor amiga e hija del capo local. La familia tuvo que encubrirlo. Ahora, sin embargo, empiezan a sucederle cosas raras