TSIRKAS, STRATÍS
Durante la segunda Guerra Mundial, en Jerusalén, ciudad de refugiados, exiliados políticos y espías, se presentan las vivencias de un sigiloso soldado griego, una pasional mujer austriaca y una melancólica alemana a través de un torrente narrativo que refleja la guerra en el Medio Oriente, pero también los deseos y anhelos de los personajes dentro del círculo de pasiones en el que se ven inmersos. Ésta es la primera parte de la monumental obra de Stratís Tsirkas, Ciudades a la deriva. Manos está involucrado en un grupo comunista griego, por lo cual oculta su paradero y su nombre completo, hasta que cierto día aparecen británicos y estadounidenses merodeando su casa y su seguridad se ve mermada. Se involucra románticamente con Emmy, pero no será sencillo concretar ese romance cuando todos andan tras su pista. Los soviéticos detuvieron el avance enemigo y en adelante rodearon a las divisiones alemanas y las obligaron a rendirse. Esta victoria cambió el rumbo de la guerra y por ende, Manos pudo estar tranquilo después de la persecución.